La entrada principal a Zumarraga desde la autovía A-636 -que conecta la localidad con el resto de municipios de la zona- se realiza por la carretera GI-631. Para la ejecución de ésta se dio lugar a unos muros de contención que con el tiempo han revertido en una zona degradada, con múltiples pintadas y rodeada de casetas y chabolas. La actuación consistió en realizar una limpieza de la parcela, crear una especie de jardín vertical mediante la plantación de 156 ejemplares de avellanos y acebos que, además de su capacidad de absorción de CO2, aportasen una pantalla vegetal entre la carretera y el barrio Ipar-Haizea; y, aprovechando el lugar estratégico que ocupan los muros, se trató de suavizar el impacto ambiental de los mismos revistiéndolos de acero corten: material que representa el carácter industrial de la zona. Con este mismo material se colocó el nombre del municipio entre las líneas horizontales superiores y se completó el conjunto con 4 planchas que representan los cuatro rasgos históricamente más significativos de Zumarraga, que a día de hoy siguen siendo visibles: La industria y protoindustria, el ferrocarril, La Antigua y la Casa Torre de Legazpi. Finalmente se potenció la vegetalización de los muros con malla y hiedra tapizante y se iluminó el conjunto según directrices del Departamento de Carreteras de la Diputación Foral de Gipuzkoa.